Cuando mencionamos “motivos nobles” se nos pueden venir a la cabeza varias ideas.
Tenemos que asegurarnos de que esos motivos sean lo suficientemente importantes para la otra persona para poder utilizarlos a nuestro favor.
Según el autor de libro Dale Carnegie, todas las personas tienen dos motivos principales para hacer o no algo. El motivo real y el motivo más noble.
No hay una sola persona, o al menos es muy difícil de encontrar, que no tenga un motivo real detrás de cada acción.
Por ejemplo, cuando buscamos ayuda de algún colaborador, podemos hacerle ver que su ayuda puede beneficiar a ambas partes, y esto puede ser cierto, pero en realidad, necesitamos de su ayuda para nuestro beneficio. Puede ser evitar una llamada de atención, agilizar nuestro trabajo, o aumentar nuestra exposición ante nuestros jefes.
Si nos ponemos a pensar detenidamente, cada acción que tenemos es por que estamos buscando algo que nos beneficie o ayude. Inclusive puede ser para beneficio de un tercero, no necesariamente el propio.
Sin embargo, nos hace sentir mejor pensar que lo estamos haciendo por un motivo más altruista, algo más noble.
Nos encanta saber que las demás personas nos consideran honestos, sinceros, desprendidos, etc. Que no buscamos el reconocimiento o la aprobación de los demás. En resumen, que somos personas nobles.
Es por esto que el autor nos dice en el principio #10 de Cómo ganar personas a nuestra manera de pensar que debemos apelar por los motivos más nobles.
Si deseamos que cooperen con nosotros, que nuestra idea o proyecto sea aceptado o inclusive que nuestros clientes acepten un cambio ya sea en los procesos o en el precio de algún servicio o producto debemos encontrar el motivo más noble en la otra persona.
Un ejemplo que nos brinda el autor es poner en práctica los principios anteriores y escuchar a la otra persona. Hacerla sentir cómoda y que entendemos la situación. Y que debido a que es una persona tan honesta, paciente y justa, consideramos que ella nos puede decir que le gustaría que se hiciera en su caso específico.
La gran mayoría va a apelar por sus motivos más nobles y va a darnos opciones justas, que consideran a ambas partes. Son muy pocos los casos en los que aplicar este principio no va a generar un resultado positivo, pero siempre se pueden utilizar los otros principios para mejorar la situación.
Recordá suscribirte aquí para recibir las últimas actualizaciones todas las semanas.
Referencias:
Libro Cómo ganar amigos e influenciar a las personas:
Versión en inglés. Versión digital.
Versión en español. Versión digital.